La Comisión Nacional del Agua (Conagua), con el apoyo de la Guardia Nacional, llevó a cabo la clausura de un pozo en Mérida, ya que no contaba con los permisos correspondientes.
Además, se impidió el paso a Conagua para realizar una inspección para verificar las condiciones en que se encuentra dicho aprovechamiento.
El uso ilegal del agua y el impedimento constituyen una violación a la Ley de Aguas Nacionales, siendo causa de imposición de sanción, ya que es obligación del usuario el permitir el acceso al personal de la Conagua a sus instalaciones, a fin de verificar el correcto funcionamiento de acuerdo con su concesión.
Estás acciones forman parte de las labores de inspección y vigilancia que realiza el Gobierno de México para verificar el cumplimiento de los títulos y los permisos de descarga otorgados, a fin de garantizar el derecho humano al agua y la sustentabilidad hídrica.